Muchos estrategas confían en la información para tomar sus decisiones. Otros, por su parte, confían en la intuición. Y algunos, los más intrépidos (sapere aude: atrévete a saber), meditan antes de actuar. Imaginar escenarios o imaginar la mejor situación posible, exige una inteligencia poderosa. Para facilitar la labor, hemos creado estos diez axiomas. El fundamento de estas tesis, es una recopilación de experiencias personales, teorías e información actual. Esperamos que sean útiles. * Identifique qué o quién tiene el máximo poder en el mercado. Imite o mejore sus prácticas. Investigue cuáles son sus procesos internos y cómo es su personal. Identifique su historia, sus políticas, su poder económico y su axiología empresarial. Espíe. * Procure que sus actos sean totalmente conscientes. No decida bajo los estímulos de la emoción, y mucho menos bajo alguna presión burocrática, económica o sentimental. Haga las cosas en frío. * Critique primero los actos de su empresa y luego los actos de las demás. La crítica constante en las empresas, tiene que ser de tres tipos: económica, ideológica y tecnológica. Medite si su corporación saca el máximo provecho de sus recursos monetarios, intelectuales y procesales. * Renueve las áreas de su empresa e identifique el rol de cada persona. Después de muchos años, los puestos se duplican, se confunden, se invaden o se vician. Tener claro quién hace qué para quién, cómo y cuándo, hace que las empresas disminuyan sus gastos, y sobre todo, los conflictos internos. * Si después de capacitar y de motivar tres veces a alguien éste alguien no reacciona, despídalo. Suena cruel, lo sabemos… pero es más cruel afectar la vida de cientos de trabajadores por culpa de un solo individuo. * Revise los procesos. Ocho de cada diez veces, la culpa de los errores la tiene un proceso, no una persona. Verifique que sus máquinas, ordenadores, instalaciones y manuales sean vigentes, ágiles y sostenibles. No espere velocidad profesional si sus máquinas y sus procesos son lentos o añejos. * Haga que su empresa sea ancha, no alta. Recorte jerarquías. Mejore la comunicación entre la cabeza y los pies si no quiere tropezarse o descalabrarse en cada paso. La estrecha amistad entre los líderes de opinión y los líderes en la acción, facilita las tareas y la consecución de los objetivos. * Redacte manuales flexibles, cambiantes y criticables. Deje que su personal piense y que lleve sus pensamientos hasta la acción. Tener programas o manuales humanos, es decir, blandos y dinámicos, mejora la actitud de la gente. Comunique, día a día, cómo visualiza la situación del mercado. * Genere un banco de información compartido (HUB). Promueva el diálogo. Haga que todo el personal, desde el directivo hasta el ejecutivo, sepa cómo van las finanzas, las inversiones, la publicidad y el marketing de la empresa. Sabemos que las grandes ideas casi siempre nacen en los lugares o en las personas menos comprometidas, es decir, menos temerosas. * Aprenda, aprenda siempre de las otras industrias. El marketing ha aprendido mucho de la ingeniería, la publicidad del arte, la administración de la psicología y las finanzas de la sociología. Como diría Deming: planifica, acciona, verifica y actúa. Buen día, Comunidad Roastbrief.
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