Cuenta la mitología griega que Narciso fue condenado por la diosa Némesis a enamorarse de sí mismo; tanto era su amor, que un día contemplándose en las aguas de la fuente cayó y murió ahogado. Parece que en ciertas ocasiones se ven Narcisos y Narcisas en internet, que terminan siendo absorbidos por las redes sociales y los medios donde se admiran. Esto es una consecuencia de la “súper comunicación” que se ha desarrollado gracias a la conectividad, pues una gran cantidad de personas se admiran a sí mismas subiendo fotos y videos mostrando sus cualidades y atributos. Estas acciones tienen dos objetivos: primero, ver cuánta fama pueden alcanzar con su belleza ¬¬– ya sea interior o exterior– para demostrarse a sí mismos lo importantes que son; y la otra razón es demostrarle al mundo que son poderosos y bellos. Estas personalidades son fáciles de descubrir, pues dedican largas horas en hacer su propia sesión fotográfica, en retocar las imágenes y subirlas; ya no es muy usado etiquetar a los amigos y amigas para que los “chuleen”, pero ahora existen las suscripciones en Facebook, que son aún más atractivas para estas personas. Lo productivo de estas personas, es que gracias al OTL se pueden descubrir elementos sociales como este caso, que ayuden a reconocer ideologías, carencias, emociones y sentimientos bases para el desarrollo de técnicas publicitarias más eficaces y atractivas para el target.
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