Creatividad y estrategia se piensa que son las características más importantes en el marketing y la publicidad, pero no es así. Esas habilidades en ocasiones tienen que conjugarse con un espíritu científico, pues la intuición o la obviedad no bastan. Al idear una acción, si no se tiene una visión objetiva y comprobada, se comete el error de ver nuestra creación como lo más maravilloso que existe aunque no sea efectiva. ¿Por qué el espíritu científico? Recordemos que el método científico consiste en tener una teoría (que en este caso se trata de nuestra pieza publicitaria). Después, esta teoría se somete a experimentación (interacción con el consumidor) para observar los resultados, lo que nos dirá si la ejecución cumple su objetivo o no. Es evidente que estos pasos no se siguieron en una acción BTL de Letonia, donde colocaron una motocicleta de juguete en un estacionamiento de clientes; ésta tenía un mensaje a su lado que decía “Motocicletas: pequeñas y vulnerables” para concientizar a las personas del cuidado que se debe tener en andar en ellas. Pero ¿qué ocurría? La gente pateaba el juguete, los coches la aplastaban o simplemente no la veían. No sabemos cuántos ejemplares se destrozaron en la realización de esta campaña, pero sabemos con las actitudes de las personas que el mensaje no se recibió. ¿Cuál era la intención? ¿Crear un video para hacerlo “viral” o concientizar a la gente en el estacionamiento? El video ayuda un poco a comprenderse, pero quizás las personas ahí no lo entendieron del todo. ¿Qué opinas?
Comentarios