Muchos son los beneficios que puede percibir una empresa debido a la buena implementación de estrategias mercadológicas. Por lo tanto, es una práctica que debe efectuarse con suma minuciosidad y pericia, ya que las estrategias son los mecanismos que llevarán a la organización a conseguir los objetivos comerciales. Una estrategia efectiva no está “tallada en piedra”. Es decir, no existe una guía definitiva que contenga la estrategia perfecta para cada empresa o producto. Las estrategias de mercadotecnia son como un buen traje: deben estar hechas a la medida. A continuación, te comparto algunas recomendaciones que te serán de gran ayuda para implementar y establecer una estrategia efectiva de marketing:
- Define tu target
Es imprescindible conocer claramente quién es el público al que vas a dirigir tus estrategias de mercadotecnia; así se tiene mayor comprensión acerca de aquello que puede funcionar y aquello que no. ¿Dónde vive? ¿Cuánto gana?, ¿Dónde está? ¿Qué medios de comunicación utiliza? ¿Cuáles son sus costumbres y marcas predilectas? Estas preguntas (y otras más) tendrás que contestar para conocer y definir a tu público objetivo.
- Establece objetivos
Toda estrategia debe contar con un objetivo especifico, claro y viable. Debe detallarse muy bien en términos de temporalidad además de tener la característica de ser factible, es decir, que pueda llevarse a cabo con los recursos de los cuales se dispone. El planteamiento de objetivos nos ayuda a adquirir una visión concreta de lo que se quiere lograr y, en ese sentido, instituir un conjunto de acciones y actividades que se apliquen en pos de la consecución de los mismos.
- Ejecución efectiva
Suena lógico que la ejecución efectiva de la estrategia sea determinante para su éxito, sin embargo, no siempre se sigue este procedimiento. Gran parte de la efectividad de una estrategia reside en ser constante y realizar las modificaciones pertinentes para su adaptación a las circunstancias. Por ello, es preciso siempre mantenerse alerta y no dejar su ejecución al garete.
- Medición
De poco (o nada) servirá una estrategia en la cual no se establezcan indicadores cuantificables (KPI). Resulta fundamental conocer el rendimiento que proporcionó su implementación, esto con el objetivo de medir la rentabilidad, el alcance e impacto conseguido.
- Plan de contingencias
Es un programa estratégico que sirve para neutralizar, prever y contrarrestar los efectos negativos que puedan surgir a partir de las estrategias implementadas. Dicho plan nos provee distintos procedimientos y alternativas viables para la resolución de adversidades que, con frecuencia, ocurren al momento de no contemplar aspectos fundamentales en la aplicación de los esfuerzos mercadológicos. Imagen cortesía de iStock
Comentarios