Muchas veces como consumidores tenemos experiencias diversas de consumo. Guiados por la publicidad la mayoría de personas, consumimos ciertos productos, que van más allá que la marca. El marketing de experiencias ahora es la clave del éxito de muchas marcas, y algunas aparecen en el Mercado con diferenciadores fuertes en cada categoría. Y algunas de las grandes o populares, pelean guiados por estrategias para mantener vigente su poder ante el consumidor. Pero ¿qué pasa cuando la marca es más poderosa que el producto?, es decir la promesa de la marca no cumple con la calidad misma de producto. El poder de la comunicación se fundamenta en la responsabilidad de demostrar la verdad sobre lo que se comunica, y si esto no se justifica puede matar a una marca, y al mensaje publicitario. Mi experiencia como consumidor hace que replantee la realidad de un producto con el mensaje que varias veces proponemos como comunicadores, sin ni siquiera consumirlo. Haciendo que el mensaje se convierta en una mentira o simplemente en la falta de experiencia con la marca. Y gracias a esto se le adjudican situaciones propias de la reacción del consumidor ante la publicidad, estos son algunos ejemplos: Fotografía de producto: Una de las primeras cosas que son motivo de crítica en publicidad son la realidad de la presentación del producto en fotografías y como la recibe el consumidor. Esto sucede principalmente en la comida, el producto no siempre será como muestra la en avisos, en menús, o en una valla. Y esto genera rechazo ante la marca, el producto y la publicidad. Nuevas marcas tratan de mostrar de manera muy real el aspecto visual del product, dándoles un plus ante el consumidor. Letras pequeñas: Bajo anuncios donde el titular dice gran oferta, gratis o pague 1 lleve 2, comunicamos un beneficio inmediato. El consumidor espera que sea real, y que no existan limitantes o trucos trás el mensaje inicial. Este tipo de situaciones se convierten en promesas falsas y hacen que se genere cierta inmunidad ante estos mensajes. Servicio al consumidor: Cuando por lo general tomamos la decisión de comprar algo, generamos expectativas al rededor del producto, pero al momento de comprarlo quizás las cosas cambian, no somos bien atendidos, el producto no está en percha, el resultado es que la marca cae ante los ojos del posible consumidor. La publicidad comunica, y aunque muchos crean que la publicidad vende, hay más aristas que ayudan al éxito de la marca y a la campaña de comunicación. Un gran aviso podrá impactar o un comercial podrá generar gran recordación, pero si un producto no es tratado bajo principios básicos de marketing de experiencias no podrá posicionarse en el consumidor, que es lo que realmente esperamos al comunicar.
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