Y llegamos a esa temporada del año en que la competencia entre detallistas se torna más agresiva que en todo el año. Y este año no será la excepción. Vivo en este país hace más de 14 años y desde aquel entonces me parecía fabuloso el posicionamiento de la campaña Julio Regalado. Al parecer se creó hace más de 30 años y sigue tan vigente como en aquel entonces. Todo el marketing que hay detrás de esta gran campaña ha logrado que sea altamente reconocida no sólo por los clientes de esta cadena sino por todo mundo. Pero también ¿por qué no? la envidiada y odiada por los competidores. Un gran ejemplo de posicionamiento. Otro gran acierto en posicionamiento es la frase «¿Vas al súper o a la Comer?». Con esta simple pero poderosa frase lograron construir en la mente del consumidor la diferenciación entre esta cadena y el resto de los competidores y además también ha permanecido durante largo tiempo. Con esta frase lograron ubicar a su cadena en un nivel diferente a las demás dándole un estatus diferente. Y ni qué decir del Miércoles de Plaza. Ejemplos todos muy destacables de buenas estrategias y prácticas de posicionamiento. Cuando Palacio de Hierro lanzó su campaña «Soy Totalmente Palacio» hace ya varios ayeres, la agencia que creo la campaña y el eslogan anotaron también un acierto: lograron posicionar la marca en la mente del consumidor como una departamental que entendía sus emociones y además las celebraba. Además, el glamour de los comerciales les hacía sentir verdaderamente especiales y confería estatus al identificarte con esa campaña. Tía Rosa, la marca de pan dulce de la compañía Bimbo durante varias décadas ha trabajado por ser el pan de las familias mexicanas al posicionarse en la mente, y también en el corazón de sus consumidores como el pan hecho como en casa. Ahora bien, probablemente la campaña «Julio Regalado» y «Miércoles de Plaza» nacieron dentro de la misma cadena con apoyo mercadológico de agencia; pero el eslogan «¿Vas al súper o a la Comer?» seguramente sí fue desarrollado en alguna agencia. Lo que todos estos ejemplos tienen en común es la constancia a través del tiempo y la paciencia para no tratar de cambiar durante el trayecto. Pareciera que es muy obvio pero no es así. Las pequeñas y medianas empresas con las que he tenido contacto, creen que esto del posicionamiento es casi casi instantáneo. Vuelvo y repito, hay que ser constantes y pacientes, no es algo que se logre de la noche a la mañana sino que se construye a través del tiempo. Esto no es como los productos milagro que vemos publicitados en televisión, toma tiempo, bastante tiempo, poder llegar al nivel de posicionamiento que actualmente tienen estas campañas.
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