Marketing = Ventas Ventas = Producto Producto = Imagen Imagen = Percepción Cuando se trata de un producto o servicio, la reputación de una marca va ligada a la percepción que las personas tienen sobre sus atributos de valor. Por otro lado, cuando se trata de una persona ocurre casi lo mismo, con la diferencia que eres tú quien está mostrando la mejor versión de tu imagen (¿o producto?) Normalmente el ligue se asocia a un ambiente de distracción, de ocio y entretenimiento; y que mejor escenario que una discoteca. La ambientación (Merchandising) transporta la mente de los rumberos (Clientes) hacia un contexto libre de estrés, exento de problemas y ajeno al trabajo. (Percepción De Valor) Desde que se llega al sitio, la sensación de confort llega hasta nuestro cerebro e invade cada red neuronal con un solo propósito: liberar la mala vibra del día. El hipocampo se acelera y trae a colación recuerdos e imágenes de situaciones excitantes que son almacenadas en la memoria a largo plazo (Neuromaketing) Al entrar al lugar, miras a tu alrededor (Observación) y procuras ubicarte en el mejor sitio (si eres hombre, nos referimos a la mesa que tenga cerca la mayor cantidad de mujeres). Cuando por fin logras ubicarte con tus amigos (Referidos) conversas con ellos para decidir que pedir. El mesero (como cualquier vendedor) llega al instante con su saludo cordial y acto seguido pregunta: “¿qué van a pedir?” A lo que el grupo de amigos responde: “en un momento” (Decisión De Compra). La siguiente acción que realizan es observar la mesa en donde “fichan la mirada” (Mercado Objetivo). Miran detenidamente y de reojo contemplan una mayor probabilidad de mesas. Cuando terminan el recorrido en segundos, observan el número de integrantes, las facciones de cada una, su manera de bailar, la forma en la que están vestidas y hasta el licor que están tomando (Análisis Comportamental). Con esa descripción, llaman al mesero y deciden pedir una botella de whisky, ya que en 2 de las 3 mesas observadas están bebiendo ese licor. (Resolución de conflictos) El licor llega y los amigos empiezan a servir sus tragos. Uno a uno da un brindis y comienza la pequeña charla sobre lo que harán. -“Bueno, ¿quién va por la del vestido rojo?”- Dice A -“¡Uy, deme otro trago que por ella voy con todo!” – Responde C -“Tome mijo, acá tiene su vaso lleno pa`que vaya de una”- Brinda A C bebe el vaso al estilo “fondo blanco” (Costumbre Mercantil) y se dirige inmediatamente hasta la chica de rojo. Después de realizarle la invitación, la chica se niega y el pobre C regresa a la mesa. -“¿Qué pasó?” – Pregunta B -“Nada, simplemente que no quiere bailar” – Asiente C -“Bueno, igual hay más opciones. Miremos en la otra mesa; también hay varias que están bailando, a diferencia de la otra (Descubrimiento del diferencial) -“Uy… a esa mesa si voy yo y levanto de una a la de falda blanca (Venta predictiva)” – dice D -“Que no le pase lo mismo que le acabó de pasar a nuestro amigo (Especulación)”- declara B -“Fresco que conozco bien como llegarle. Vean, primero que todo, no caerles de frente. Hay que pasar por el lado y percibir la reacción. Usted va al baño tranquilo, se lava las manos y se echa un poquito de agua en la cara. Se arregla la camisa y mira que no tenga nada extraño en su pinta. Se seca y de regreso aborda a su objetivo por detrás: suavemente la toca por la cintura y la invita a bailar (Ritual de Venta). Eso fijo le dice que sí” – responde D. D toma camino y efectivamente pasa por la mesa. Las mujeres no observan mucho pero él sigue su camino. Al cabo de unos minutos, ven que su propósito se ha cumplido y baila un buen rato con la mujer de falda blanca. En la mesa discuten: -“Bueno, ya vengo muchachos, voy a bailar un rato con la pelirroja que desde hace rato está que me mira. (Certeza De Garantía)” – Menciona A Mientras que A y D están bailando, B y C beben un trago más… -“Hermano, esa del vestido rojo me tiene tramado; yo voy a ir otra vez a invitarla, qué tal que me diga que si (Insistencia en los beneficios)” – Argumenta C -“Hágale; lo menos que le pueden decir es NO. A demás que la “pelada” ya está más alegre que hace un rato. (Claridad sobre la Oportunidad)” – Dice B Al ir nuevamente directo hacia su objetivo, C notó que la mujer había cambiado su aspecto reservado y le soslayó una sonrisa mientras que iba al encuentro con él. Más de uno se siente identificado con esta escena. Y, más de uno se siente identificado con cada personaje: A (Decisivo) B (Pasivo en la Toma de Decisiones) C (Insistente) D (Experimentado) El marketing tiene que ver en cada aspecto de nuestras vidas. Tomar una decisión en un momento tan “relajante” como estar en una rumba, involucra uno de los aspectos cruciales al persuadir a un prospecto: VENDERTE A TI MISMO. Por eso, procura que la percepción de valor que tienen sobre ti sea beneficiosa respecto a tus competidores, ya que, tu promesa básica de valor debe ser apoyada por un sobresaliente portafolio de sensaciones. Imagen cortesía de iStock
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