Desde hace varios días este baile ha causado un gran revuelo entre las masas. El ritmo pegajoso y los movimientos desenfrenados invitan a realizar una propia versión de este bailoteo que se ha vuelto muy popular, incluso entre marcas. Todo comenzó con un grupo de jóvenes que hicieron un video mientras bailaban la canción creada el año pasado por el productor Harry Rodríguez. En el video hay dos escenas: en la primera hay sólo un personaje bailando con movimientos poco comunes, rodeado de personas que no le prestan atención; el ritmo cambia y con ello la escena, donde los personajes aparecen disfrazados y bailando con movimientos bruscos. Lo que reflejan estos videos es la soledad que sienten las personas. Con el primer personaje bailando en solitario, muestra la libertad individual que se oculta en cada ser y que es ignorada por los demás que viven “normal”. “Todos los hombres, en algún momento de sus vidas, se sienten solos”, dice Paz. Después, el baile con disfraces no significa que cada personaje se ponga una máscara; es más bien lo que queda al quitarse la máscara de seres racionales: un puñado de impulsos. Y aun así, los personajes no interactúan entre ellos; si lo hacen es en modo automático, por lo que refuerza la idea de la soledad que a la vista parece divertido. Dice Aristóteles que el hombre solitario es una bestia o un dios, y aquí se combinan ambos. Este acto de moda lo han representado hasta equipos de fútbol y marcas como Intel, Google y Pepsi que han creado su propia versión. Otras marcas, como una Fundación para ayudar a personas con Parkinson y Volkswagen Dubai también han ocupado el Harlem Shake, pero muy a su manera y con un toque más creativo e inteligente. http://www.youtube.com/watch?v=el1qRkva_ts http://www.youtube.com/watch?v=ql0YovgOROo
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