En este mundo dual donde todo se presenta por pares, bueno o malo, valor o miedo, suerte o desdicha, es importante tratar de mantenerse siempre en el lado positivo. Pero, ¿en dónde está el bien, hacia dónde nos dirigimos para alcanzarlo? Nuestra configuración corpórea nos enseña que lo bueno está arriba, en la razón que radica en la cabeza, mientras que lo malo está en los impulsos, en los pies que nos sirven para salir corriendo. Si caemos nos lastimamos y si brincamos producimos adrenalina y nos sentimos bien. Esto lo han ocupado las religiones, diciéndonos que en el cielo está la gloria y abajo están el espacio donde los seres hostiles habitan. También esto se ha convertido en un escenario bastante recurrido en la publicidad. Nubes, amaneceres, tomas del cielo y personas mirando hacia arriba son las imágenes que podemos ver en innumerables comerciales. En esta ocasión la Lotería de California evoca la magia de la nieve en la ciudad, que proviene del cielo como si de una bendición se tratara. Por designio de los dioses una bola roja cae entre todas a un afortunado hombre. Esta es la evidencia de que el cielo provee en el momento menos esperado para los mortales pero en el momento perfecto para los estoicos. ¿Será posible que las personas se cansen de la publicidad emotiva y onírica? Foto cortesía de Fotolia.
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