La preparación que se nos torga desde chicos, de estudiantes y de universitarios es para ser personas de éxito. Saber manejar las situaciones desfavorables, las inesperadas y los retos nos ayudarán a conseguir más rápido nuestras metas y objetivos, ya sean personales o empresariales. Y cuando alguna experiencia no es tan buena, nos enseñan a tomarla como un fracaso.
¿Qué ocurre con todo aquél que fracasa? Se desvaloriza. Pero no tendría por qué suceder así. Un fracaso es tal cuando no se aprende y no se intenta algo más. Un fracaso del cual se puede aprender y que nos obliga a crear para resolver la situación es lo realmente interesante. Esto nos cuenta Jeremy Gilley en las Possibility Sessions de Coca Cola Zero.
Este actor inglés, fundador de “Peace One Day”, una organización sin fines de lucro que tiene el objetivo de dar a conocer el Día Internacional de la Paz, expone ante el mundo algunas de las dificultades que tuvo en su proyecto y cómo fue que éstas impulsaron su capacidad de resolución y el ímpetu para cumplir sus objetivos.
¿Quieres saber qué fue lo que vivió Jeremy Gilley?
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