El eco-marketing ya no es una herramienta que empresas avanzadas o de gran poderío en el mercado usan para diferenciarse del resto; esta “herramienta” ha estado teniendo una gran importancia para el mercado de tal forma que la gran mayoría de las empresas lo está llevando a cabo para darle un valor agregado a la cuestión ética y moral con respecto al medio ambiente. No ejercer este marketing dentro de una empresa podría significar una reducción significativa en la competencia con otras empresas para llegar a la cabeza u ocupar un puesto clave dentro del liderazgo que intentan tener sobre el mercado. No adaptarse a estos nuevos patrones de pensamiento, implicaría de manera casi inmediata descender a la lista negra de empresas no deseables o aceptadas por el mercado, lo cual sería un caso de poca gratitud para cualquier empresa ya que el propósito de toda empresa es o debería ser la satisfacción en todos los aspectos del mercado al que va enfocada esta. Es innegable decir que para que una empresa tome cierto liderazgo dentro del mercado ya no es suficiente tener una gran visión o una amplia gama de valores, para darle un valor agregado de suma importancia para el mercado se debe ser innovador y/o copiar modelos que hayan tenido resultados satisfactorios para otras empresas, tal es el caso del eco-marketing o marketing ecológico, una empresa empezó con esta gran innovación y el resto lo fue copiando de tal manera que en la actualidad una empresa sin este marketing es una empresa con una gran escases e incapaz de ocupar un puesto clave en la competencia del mercado. Esta nueva tendencia demandará creatividad para las empresas ya establecidas y también dará nuevas posibilidades para el surgimiento de emprendimientos que apunten particularmente a dicho marketing. Imagen cortesía de Fotolia.
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