El Mundial de Fútbol de Brasil está a la vuelta de la esquina y las agencias de publicidad y anunciantes ya están ultimando sus preparativos para sacar el mayor partido posible a este evento deportivo que se celebra en un país grande y caótico. Sao Paulo, una de las ciudades que acogerá este evento, se presenta como un lugar complicado y poco preparado para celebrar un acontecimiento de esta envergadura durante un mes, pero parece que las marcas y agencias ya han tomado el pulso a la ciudad y están mucho más preparadas para sacar gran beneficio de este evento futbolero que el propio país. Algunas agencias de publicidad como DDB, McCann oBBH cerrarán a mediodía las jornadas que el equipo de Brasil juegue, además de montar pantallas en las oficinas para que los empleados puedan disfrutar de este acontecimiento deportivo desde su puesto de trabajo. Sao Paulo es una ciudad rebosante de creatividad donde las agencias han encontrado un hogar perfecto para desempeñar sus labores y están viviendo un crecimiento sin precedentes. Esta ciudad brasileña también es la cuna de importantes marcas como Havaianas o los bancos Bradesco o Itau, algo que demuestra el momento de crecimiento en que se encuentra el país. Los grandes desafíos a los que se enfrentan agencias y anunciantes es la criminalidad e inseguridad, unida al fuerte descontento ciudadano que llena de protestas y disturbios todo el país. Otro problema ante el cual se encuentra Sao Paulo es su fuerte rivalidad con Río De Janeiro, una ciudad en plena ebullición que atrae a muchas agencias y marcas, y cuyo idílico paisaje la ha convertido en el albergue de las mayores agencias del panorama. Agencias y marcas han encontrado en Sao Paulo un lugar idóneo para ejercer su actividad y sacar el máximo provecho al Mundial, pero parece que el país no está tan preparado.
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