No es un secreto que una, sino la mejor marca que le ha sabido sacar provecho al mercadeo y la publicidad aún antes de que estos existieran como conceptos, es la iglesia y más específicamente la católica. ¿Pero donde radica su poder, y su capacidad de kilometraje o perdurabilidad en el tiempo? Considero que Matt Murdock y Martin Lindstrom pueden darnos esta respuesta. Según Lindstrom las experiencias religiosas activan en nuestro cerebro el núcleo caudado el cual se encarga de generar las sensaciones de alegría, serenidad, conciencia del ser y el amor. Estas experiencias religiosas las podemos definir como fe, la cual a su vez es la búsqueda de nuestro ego por un yo superior; o como lo diría Aristóteles la búsqueda de una realidad metafísica o la perfección del todo. Aunque no considero que Matt Murdock estaría tan de acuerdo con Aristóteles, su álter ego sí lo está. Nuestro héroe vive en la oscuridad, tiene una ceguera que lo ha condenado a estar en ¨desventaja¨ frente a sus prójimos. En una sociedad que le ha dado un estatus sobre evaluado al sentido de la vista, en gran parte promovida por la publicidad. La cual hasta hace muy poco ha reconocido el valor de la seducción que nos dan los demás sentidos. Partiendo esto Matt Murdock decidió que sus otros 4 sentidos tenían que ser lo suficientemente poderosos como para convertirse en un hombre sin miedo, un hombre que pude sobrepasar a dios. Debemos dejar nuestros miedos atrás. Lindstrom en su libro de Buy-ology nos muestra 10 Pilares sobre los cuales se basa una religión, y con los cuales podemos fortalecer el posicionamiento de una marca: sentido de pertenecía, visión clara, poder sobre el enemigo, atractivo sensorial, narrativa, grandeza, evangelismo, símbolos, y rituales. La finalidad que una marca debe buscar es ayudar a sus consumidores a ser mejores personas, lo cual precisamente no significa ser buenos. Las marcas deben de ofrecer un mensaje inspirador pero que no ate o haga sentir mal a los consumidores, esa es una labor que ellos ya le han dejado a la iglesia y no desean que se les recuerde. Al igual como, Daredevil no quiere que se le recuerde que él es un abogado que promueve la ley, y por ende no debería de ser un justiciero enmascarado. Sí hacemos una introspección, sobre las principales marcas del mundo como lo son Coca-cola, Apple y Google; para poder entender su labor evangelizadora. Seguramente lo que encontraremos será algo conocido en las neurociencias como efecto placebo. Y es precisamente allí donde radica el poder de Murdock el cual al ponerse su traje de héroe deja atrás los miedos que lo acomplejan en su vida social algo totalmente verosímil con lo que nos pasa cuando adquirimos un iphone o un iPad.
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