Emprender un negocio no es fácil, es un acto que requiere disciplina, esfuerzo y mucho tiempo por parte del empresario. Aunque muchos piensan que la independencia financiera es una alternativa al mundo laboral tradicional, la realidad es que no todos nacemos para ser emprendedores. Etimológicamente negocio quiere decir “negación del ocio”, una definición que nos releva que no vamos a tener mucho tiempo para divertirnos ya que el régimen de vida es exigente y retador, y en ocasiones implica decisiones difíciles y renuncias importantes. Si ya estás trabajando en tu proyecto personal o piensas hacerlo más adelante, te presentamos algunas recomendaciones para que tengas más éxito.
- Tiempo libre
La primera demanda de tu negocio será la disponibilidad de tiempo. Si de empleado contabas con el fin de semana para pasarlo con tu familia y amigos ahora estás a disposición de cualquier eventualidad que ocurra en la oficina. Si hay que solucionar un problema, atender a un cliente o hacer alguna negociación tendrás que estar ahí, no importa el día de la semana o la hora. Además a menudo los emprendedores se hacen cargo de más de una tarea, de modo que siempre habrá algo urgente o importante que hacer.
- Vacaciones
México es uno de los países con menos vacaciones en el mundo. Si fuiste o eres empleado antes de emprender tu negocio y las vacaciones que tuviste te parecían poco hay noticias peores, cuando te conviertes en emprendedor tendrás menos tiempo de tomarlas.
- Seguridad financiera
Si bien es cierto que cualquier empleado, así sea el director de una gran empresa, puede perder su trabajo de un día a otro, tener un salario fijo y un contrato laboral siempre da cierta seguridad económica. Tienes la confianza de recibir cada mes un monto determinado para cubrir tus gastos y necesidades, pero cuando dejas tu empleo para crear tu propia empresa los ingresos no son seguros, incluso puedes pasar tiempos difíciles. La estrategia para enfrentarlo consiste en dos acciones, planeación y ahorro para emergencias.
- Familia
Quizás es uno de los sacrificios más difíciles para los emprendedores, sobre todo si tienen hijos. Cuando se emprende, el trabajo se duplica y en ocasiones el tiempo de calidad con los seres queridos disminuye. Sin duda la naturaleza del negocio y la manera en que se involucre la pareja pueden hacer la diferencia.
- Horas de sueño
Si no hay tiempo para la familia o para tomar vacaciones, quizás haya poco tiempo suficiente para un descanso reparador. De tu descanso depende que funciones bien cada día.
- Vida social
Si antes de emprender eres una persona muy social, quizás recibas reclamos de tus amigos más cercanos porque te has alejado, es algo que tienes que aprender a sobrellevar.
- Bienes materiales
Un negocio requiere muchos recursos, y hay muchos emprendedores que ponen a disposición de la empresa algunos patrimonios y bienes como autos, casa, etcétera, para encarar emergencias. Aunque el precio a pagar parece bastante alto, las personas que lo hacen pueden salir victoriosos y con gran éxito, el camino no es fácil pero sí es posible y sólo hay que tener en mente una palabra. Triunfar.
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