Últimamente he oído de personas que no tienen la capacidad de encontrar aquello que los apasione, que los mueva, que los invite a soñar, a levantarse cada día y llenarse de motivos para comerse el mundo. No sé por qué será, quizá han postergado mucho algo que puede mostrarles el camino, probablemente han descubierto (para sí mismos) que son buenos para varias cosas pero que ninguna se les da de la mejor manera.O simplemente viven del qué dirán y se cohíben, prohibiéndole al mundo conocer su esencia. A veces me planteo si soy o no buena para esto, pero luego me doy cuenta de que me divierte hacerlo y al escribirles siento que una parte de mí es como una amiga íntima y les revela cosas que quizá a nadie le diría, pero sé que puedo confiar en mis palabras, en mis pensamientos y sobre todo en mi. Así que he decidido esforzarme más siempre y cuando en el camino haya diversión. Algunas ocasiones pensé en que era buena graficando, quizá lo sea pero no le di el debido valor a la cuestión porque inconscientemente descubrí que lo que me llena y lo que me hace suspirar es narrar, describir y hablarle a un papel. ¿A ti qué te llena? A mí la vida me mostró una variedad infinita de frutas de las cuales quise probar bastantes, pero ni mi estómago, ni mi cabeza, ni mis brazos dieron abasto, el problema radica en que mi boca las quiere todas y ya muchas han empezado a podrirse. Es por eso que me quedo con las que me fascinaron, pero también contemplo y averiguo el origen de esas que me llaman la atención, hasta antes de que se pudran, cambien su aspecto, su olor y se conviertan en nada. Siendo así, la vida no sólo nos da limones, solo que muchos han optado porque ésa sea su fruta favorita, ácida y cítrica, no dulce y suave. Yo he usado los limones para tomarme un buen tequila o una refrescante michelada, pero no los tomé como opción para hacerlos lo más importante en mi vida. En conclusión, de toda mi ensalada de frutas, escribir es para mí ese fruto que brilla y me dice “pruébame” cada día de mi vida. ¿Cuál es tu fruta favorita? Compártela conmigo en Twitter. Feliz martes. Imagen cortesía de iStock
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