Ya había hablado de anteriores juegos donde resalto la mayor parte de su historia, que no necesitan multijugador o que son obras maestras como tal. Tras comentar sobre lo envolventes que algunos videojuegos llegan a hacer, un lector (y amigo mío) me pidió una opinión sobre los DLC, que si los consideraba una buena o mala idea…Sin duda es de los temas más interesantes para la industria Geek porque puede generar debates con ideas y opiniones bastante válidas para cada lado. Para muchos, el contenido digital descargable (su nombre en español) se considera como una manera fácil de vendernos un juego parcialmente hecho que se complementa de manera digital a cambio de dinero extra al ya invertido al momento de comprar (en México, los videojuegos son un juguete caro, incluso los que ya se han usado), generando una inversión más alta de la que al principio se exhibía en los retailers. Generalmente, son los que esperan a la versión extendida o Game of the Year con un precio reducido para evitar un gasto innecesario. Para otros muchos, por supuesto, significa que un juego puede llegar a explotarse más al ofrecer expansiones o historias independientes de la principal, atrayendo un público cautivo y ofreciendo soporte por mucho tiempo más que el promedio de utilidad de una producción así. Es una manera de “aderezar” la experiencia del juego sin tener que esperar tanto, aunque implique que se deba usar al “dinero plástico”. Quizá otra razón es porque consideran “bueno” el tener el juego el día del estreno tras haber esperado mucho tiempo desde que se anunció su desarrollo. Para mí, los DLC son bienvenidos siempre y cuando aporten algo relevante a la trama o amplíen una historia extensa para mostrar nuevos contextos dentro de la misma (tipo Last of Us, Uncharted o Alan Wake), pero no para desbloquear personajes (específicamente en los títulos de peleas) o mejoras estéticas, como lo han sufrido algunos juegos en las generaciones actuales. Personalmente, no me molesta esperar unos meses para conseguir un juego con sus expansiones pero tampoco me resulta tedioso buscar un DLC si cumple con las condiciones anteriores. Eso sí, hay que aclarar que si un DLC casi pide medio presupuesto de la comida, es mejor esperar por una versión más completa antes de sufrir inanición. Como dije en unos párrafos anteriores, tener juegos buenos y originales no es barato aquí, por lo es un tema de importancia entre la comunidad de jugadores. Es como si, por ejemplo, compras un pastel pero solo te dan una rebanada a precio entero o a veces te agregan más cosas, como frutas, para hacerlo más agradable o disfrutable con la inversión que realizaste. Al final del día, la gente tiene la última palabra, por lo mismo, esas prácticas son repudiadas pero continúan simultáneamente por los consumidores de estos contenidos digitales. ¿Recuerdan los tiempos en los que ponías los juegos y simplemente disfrutabas la historia sin preocuparme de agregar algo más? Buenos tiempos sin duda.
Comentarios